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lunes, 8 de julio de 2019

CON LA MUERTE EN LOS TALONES (North by Northwest) (Alfred Hitchcock, 1959) [60 aniversario]


"Quería algo divertido, desenfadado, libre del simbolismo del resto de mi cine."

Y lo hizo tan bien que 60 años después es un filme tan disfrutable, o más, como el día de su estreno. Hitchcock prolongó al máximo algunos de los esquemas e ideas que ya trató en trabajos anteriores, fundamentalmente en '39 escalones'. Un barullo genial que en un principio iba a titularse 'El hombre en la nariz de Lincoln', el Kaplan de Cary Grant es una oda al falso culpable (volvemos a los esquemas hitchcockianos), ese gran McGuffin.

La película es una feria de atracciones continúa, posee gran influencia en el considerable atractivo que tiene: la más entretenida del maestro del suspense, un guión excelso de acción, espías, la belleza de Eva Marie Saint cuya lealtad oscila entre los polos opuestos de buenos y malos, y un desarrollo plagado de secuencias memorables. La banda sonora de Bernard Herrmann y los créditos son equiparables en iconografía a 'Psicosis' y 'Vértigo'. Hitchcock concluiría su periodo dorado obteniendo las mejores notas con 'North by Northwest'.


viernes, 24 de mayo de 2019

INDIANA JONES Y LA ÚLTIMA CRUZADA (Steven Spielberg, 1989) [30 aniversario]


"Alemania declara la guerra a los Jones."

30° aniversario de INDIANA JONES Y LA ÚLTIMA CRUZADA (Steven Spielberg, 1989). Mi favorita de la saga del aventurero del sombrero y el látigo. La fórmula clásica del cine de aventuras estaba presente, con todos sus elementos bien definidos, lo que halló Spielberg, por entonces chico maravilla de Hollywood, para revitalizar el género fue la inclusión de un nuevo elemento: el padre del arqueólogo.

También se narra el origen y evolución del protagonista, desde su estilo de Boy Scout aventurero hasta la relación paternofilial. Una exploración psicológica de los personajes.

'En busca del arca perdida' trataba sobre la recuperación del arca de la alianza de manos de los nazis, aquí el enemigo es el mismo pero esta vez deben recuperar el Santo Grial, en el que se combinan la piedra filosofal y la copa donde se recogieron las últimas gotas de la sangre de Cristo.

Venecia, Berlín, Arabia (y rodaje en Almería) son los caminos que visitaremos durante la búsqueda del Grial en una de las mejores películas de aventuras de los ochenta de la mano de los Henry Jones. "Mejor que la aspirina, el opio y el vodka juntos", llegaron a decir en Manchester Guardian.





lunes, 8 de abril de 2019

LA FORTALEZA ESCONDIDA (Kakushi Toride no San-Akunin) (Akira Kurosawa, 1958)


Aventuras en el Japón feudal del siglo XVI, época de guerras cíclicas, diversión a raudales, acción, dosis de humor, duelos de samuráis, princesas guerreras, persecuciones y, además, un cuento cargado de humanidad y metáforas sobre la codicia, la amistad y la concepción del honor en la tradición del bushido.

El filme de Akira Kurosawa contiene una épica rica en valores con una puesta en escena atractiva, en una aventura de narrativa occidental, ágil, donde siempre están sucediendo cosas y no deja ni un mínimo resquicio al aburrimiento. El director japonés había bebido mucho del western de John Ford y ese estilo lo plasma en pantalla en base a una representación oriental.

Famosa por ser una de las fuentes de inspiración de George Lucas a la hora de confeccionar su archiconocida saga galáctica. Y es que son varios los elementos de 'La fortaleza escondida' en los que se ven reflejados esa deuda de Lucas: Lo primero y más destacable es la cómica pareja de campesinos, la relación entre ambos y conductores del relato. Escenas de persecuciones recuerdan mucho a alguna escena de Endor, la princesa Yukihime por carácter y estilo podría ser Leia, el duelo de lanzas entre los generales Rokurota Makabe y Hyoe Tadokoro, antes amigos y ahora rivales, o la criada que se hace pasar por la verdadera princesa.

Nutrido de guiños como el final, la estructura narrativa, las cortinas laterales entre escenas, el argumento tiene trazos similares junto con ese variopinto grupo de héroes. Podría decirse que 'La Fuerza' reside en esta película Jidaigeki (género al que pertenece, un nuevo guiño de Lucas y sus caballeros Jedis) antes de viajar a una galaxia muy, muy lejana.

Una película de aventuras clásica de gran factura técnica, como nos tiene acostumbrados "el emperador" en sus producciones, con un magnífico Mifune y una encantadora Misa Uehara encabezando el reparto. Diversión 100% con mensaje moral.



























sábado, 6 de abril de 2019

LA HISTORIA INTERMINABLE (Wolfgang Petersen, 1984)


"- ¿Cuántos deseos puedo pedir?
- Tantos como quieras. Cuantos más pidas más grande se hará Fantasía."


Basada en la novela de Michael Ende, editada en España un año antes del estreno de la película, fue un punto de inflexión en la forma de soñar a través de la pantalla de toda una generación, gracias, en parte, a la eclosión de los efectos especiales unos años antes de Star Wars. Un tiempo dulce y mágico para los amantes del fantástico, Petersen supo captar perfectamente la esencia de la novela aunque no pretendía sustituir a la misma. 35 años después de su estreno, sigue destilando magia y un mundo de sueños, aunque se nota el paso del tiempo en algunos aspectos del filme.

LA HISTORIA INTERMINABLE era un canto vitalista a la fantasía y la imaginación frente a la monotonía de una realidad obscena.



















jueves, 3 de enero de 2019

Crítica | FITZCARRALDO (Werner Herzog, 1982)


"¡Quiero mover una montaña!"

'Fitzcarraldo' nos cuenta la historia de una obsesión y parecer ser también la obra de un hombre obsesionado. "Soy un tejedor de sueños", dice Herzog. El proyecto era una locura, la misma de la que trataba la película, la locura de un hombre (Klaus Kinski resulta deliciosamente demente de principio a fin) que quiere construir una ópera y llevar la cultura hasta el corazón del Amazonas.

Herzog, que conocía el carácter impredecible y difícil de Kinski, ya había trabajado con él anteriormente en un entorno selvático en 'Aguirre, la cólera de Dios (1972)', había previsto esta clase de problemas, no contó en un principio con él. Sólo se hizo necesario para sustituirlo por Mick Jagger, el vocalista de los Stones era el candidato principal, pero Kinski resultaba el indicado para el papel. 

Nadie tenía su particular carisma, el aura de un visionario solitario y demente. El personaje principal se convierte en una imagen del propio director. La obstinación de Herzog para llevar a cabo su proyecto a toda costa dejó un reguero de penalidades importante, solo comparables a las de Coppola en 'Apocalypse Now (1979)': abandono de personas principales, el estallido de la guerra entre Ecuador y Perú, sequías e inundaciones, mordeduras de serpientes y graves accidentes.

La fuerza visionaria del filme reside en la autenticidad de sus imágenes. El barco fue arrastrado realmente por los indios montaña arriba. Herzog atravesó los rápidos como muestra a través de su cámara, sin duda, la dirección es una de las grandes bazas de la película. Claudia Cardinale caracteriza perfectamente a la dama de provincias muy afín al carácter de la actriz italiana.




























jueves, 15 de noviembre de 2018

Crítica | MASTER AND COMMANDER: AL OTRO LADO DEL MUNDO (Peter Weir, 2003)


"La disciplina es tan importante como el valor."

Aventuras marítimas en tiempos napoleónicos, lección de liderazgo que debería estudiarse en todas las universidades y un ejercicio cinematográfico de elegancia, rigor histórico, ritmo narrativo y preciosismo visual.

Considerada como un análisis muy cercano de la condición humana, el filme de Weir es un duelo en sí mismo: navíos realizados con mimo, la lucha contra otros y la naturaleza, el propio trayecto vital de los héroes y el choque del capitán Aubrey y el doctor Maturin (Crowe y Bettany en la cima de sus carreras) en el buque de O'Brien, mentalidad militar indomable contra el positivismo científico.

Un canto al espíritu del cine de aventuras, actuando como homenaje a los grandes clásicos del género marítimo, la obra oceánica de Weir ofrece diversión pura y dura a bordo del HMS Surprise. Liderazgo, valor, ciencia y música.



lunes, 8 de octubre de 2018

Crítica | DEMOLITION MAN (Marco Brambilla, 1993)


"Tiene gracia la cosa, me sacan de una cryoprisión convertido en una puta costurera."

Una de esas películas que marcan una infancia, como es mi caso. También una de las esenciales para comprender el culto al cine de acción de tipos duros de los 90. Aquellos chavales que íbamos a escoger esas películas al videoclub no mirábamos que fuera una libre versión de 'Un mundo feliz' de Aldous Huxley, ni sus referencias a la corrupción gubernamental. Eso ya vendría con el tiempo y la experiencia cinematográfica.

Queríamos ver a Stallone, el policía más rudo del siglo XXI, zurrándose de lo lindo con un villano de opereta, histriónico y pasado de vueltas como era aquel teñido de rubio Wesley Snipes, el criminal más despiadado del siglo XXI, ambos descongelados de la cryoPrisión e igual de perdidos en ese futuro lleno de estúpidas normas.

Todo en un marco futurista improbable, lleno de encanto, estrambótico, infantilizado, en el que las obscenidades están prohibidas, no existe el sexo físico y Pizza Hut domina la restauración. Por suerte los "viejos rockeros" ponen la irreverencia y el toque de humor, y hacen disfrutar como nunca en una trama tan tontorrona como los diálogos en una cinta que nunca se toma en serio a sí misma.

DEMOLITION MAN es un cómic americano de principios de los 90 hecho película, gran y entretenidísima superproducción con toques de humor, altas dosis de acción y personajes con encanto. 25 años después de su estreno, seguimos sin saber utilizar las tres conchas.




























miércoles, 20 de junio de 2018

ASSASSIN'S CREED (Justin Kurzel, 2016)






















En la adaptación de ASSASSIN'S CREED dirigida por Justin Kurzel, cualquier parecido con el videojuego homónimo de Ubisoft es pura casualidad. Un completo elenco de renombre no consigue dar empaque a una historia vacía, curiosamente, todo lo contrario a la saga de videojuegos en las que se basa. Conseguida la diferencia de ambientaciones, aunque desaprovechado "el viaje" a la Andalucía de 1492 y todos sus interesantes entresijos históricos. Además, tampoco funciona como producto de entretenimiento de evasión gracias a un ritmo irregular. Quitando un par de escenas de acción (qué mínimo...), la disputa "realista-ficticia" entre el credo de asesinos y templarios en la pantalla grande no termina de cumplir.



Valoración: [4/10]  
★★★





Paco Garrido

miércoles, 13 de septiembre de 2017

Crítica | NORTHMEN: A VIKING SAGA (Claudio Fäh, 2014)


Nuevo intento de aventura épica de acción con Vikingos como excusa, nueva decepción. Lo curioso es que haya cuatro guionistas para escribir una historia tan simple que podría caber en una servilleta. Se salvan los efectos especiales y algunas coreografías de combate, ya que los puntos negativos son francamente visibles y generales. 

Los protagonistas tienen poco carisma, el grupo protagonista no puede ser más tópico: el nórdico fortachón, la chica indefensa, el monje guerrero y el arquero certero. Podría ser el tándem de cualquier otra obra de rol o aventura fantástica que se precie. Los enemigos del asunto son una comunidad de temibles guerreros balcánicos llamados los lobos y con terroríficas máscaras. 

Una historia que hemos visto mil veces, una cruzada "buenos vs malos" que no deja de ser una persecución por verdes páramos y bosques escoceses en donde se fraguan refriegas con pérdidas puntuales para intentar sacar la emotividad del público, sin conseguirlo, ya que no crean ninguna empatía. Situaciones ilógicas, efectos especiales, aventura, batallas, carencia de guión y emoción, previsibilidad y aire de telefilm de acción es lo que esconde Norhtmen. Un intento de acercamiento para los amantes de la mitología nórdica muy descafeinado globalmente.




















Valoración: [4/10]
★★★★★





Paco Garrido

miércoles, 8 de febrero de 2017

AGUIRRE, LA CÓLERA DE DIOS (Werner Herzog, 1972)


La búsqueda de El Dorado, en los barrizales intransitables del amazonas entre una atmósfera claustrofóbica. Mezcla de géneros como la historia y la aventura. El guión está basado en el único testimonio real de la época, escrito por el fraile Gaspar de Carvajal. La rebelión de Lope de Aguirre, los crímenes de los conquistadores desde los Andes al amazonas. Aguirre lidera un motín contra el comandante. Apertura y desenlace magnéticos, aspectos destacables del filme gracias al buen hacer con la cámara del director alemán. La barbarie de la conquista está bien plasmada, sobre todo el los primero planos, con la muerte por agotamiento de los indios o la escena que la balsa se pierde.

Sentimientos encontrados con el filme de Herzog, un filme muy bien rodado entre el límite de documental (escenas con animales) y ficción, con la base real, ante la imposibilidad del ser humano ante la lucha contra la naturaleza. Admirador de Murnau, Herzog quiere plasmar la potencia visual del cine mudo aunque la película no pierda un ápice de su calidad aunque no escuchemos nada. Impactante en la fecha de su estreno, gracias al realismo propuesta de Herzog, embarcado en sontonía con el amazonas, encima de una plataforma y con planos largos del agua, los árboles y de la propia madre gaia. Visualmente potente pero quizá no filma nada importane. Equipo de ocho personas, perdidos en el Amazonas, con un actor principal loco y con escenas vigorosas, cerca de un poema visual mezcladas con escenas tediosas y sin sentido, además de ridículamente cómicas dentro de un tema serio, que te saca de la película. 

Primera colaboración de muchas entre Herzog y Kinski, el que estuvo apunto de abandonar el rodaje por la dureza del mismo (interprete de cosas muy interesantes como Nosferatu y Fitzcarraldo) ya desde el principio entre fuertes discusiones entre ambos. Lucha del hombre con la naturaleza, ese descenso a la locura, la ansias de poseer, destruir y ser dios. El rostro impenetrable de Kinski refleja ese ímpetu de locura y destrucción, capaz de recitar poesía en su descenso a los infiernos con unos monólogos fantásticos, comenzando a sentirse superior como salido de un relato de Lovecraft. A su vez, parece conectado con esa naturaleza, refleja cierta conexión con los animales que le rodean. kinski es un retrato de la mentalidad de un guerrero que está perdido y se encuentra consigo mismo en la selva, uniendo la demencia al hombre.

La figura de Lope de Aguirre tiene muchos matices, igualmente daría para un estudio o reflexión mucho más profunda, incluso su muerte. Kinski le da todo lo que necesita el personaje, la autenticidad entre la locura y la cordura del hombre, más por su colérico físico que por sus dotes interpretativas. Si los conquistadores hubieran tenido una cámara en el 1560 hubiera sido muy parecido al tono documental filmado por Herzog. Se siente la humedad de la selva, gracias a la frescura de la improvisación y el realismo cámara en mano. Se pierde entre escenas tediosas y ridículas, que a su vez se intercalan con escenas muy potentes tanto visual como poéticamente hablando. La falta de argumento nos deja diálogos estupendos y otros estúpidos. Aguirre el conquistador y sus poéticos monólogos, rey de los monos sobre una balsa. La metáfora del hombre.





















     Valoración: [6/10]     
★★★★★★★★★★



Paco Garrido

jueves, 24 de diciembre de 2015

Especial: Star Wars. La Guerra de las Galaxias (George Lucas, 1977-1983)





"Hollywood abrió la caja de Pandora al rodar La Guerra de las Galaxias." Woody Allen. 

El bueno de Woody tenía mucha razón, nadie esperaba en aquel lejano 1977 que la película del guionista/director George Lucas 'Una Nueva Esperanza' (¿El episodio IV de una saga... sin sus tres primeras partes?) un "western de ciencia ficción" fuese un éxito tan rotundo. Lucas también creó una mitología que ha transcendido de generación en generación, haciendo suya tanto mayores como jóvenes, sintiendo absoluta devoción a un reparto prácticamente desconocido en esa época (Harrison Ford, Mark Hamill y Carrie Fisher). Tanto es así, que los jefes del estudio estaban tan convencidos del fracaso de la cinta que dieron a Lucas los derechos de comercialización de todos los productos relacionados con La Guerra de las Galaxias. Nunca se percataron del enorme potencial que escondía la película, y nunca pensaron en que daría origen a dos secuelas, una trilogía que hacía de precuela, películas derivadas del mundo Star Wars, series animadas, juguetes de todo tipo, videojuegos, bandas sonoras, libros, camisetas, tazas, DVD's y todo tipo de productos, hasta alimenticios. 

Considerada una de las sagas más importantes de la historia del cine, con Star Wars nació el concepto de Merchandising, además de relacionarse directamente con términos tan de moda como freak. Además de un imaginario brutal de criaturas y razas en esta galaxia muy lejana, basada en la lucha entre el bien y el mal, nos presentan a personajes y objetos que han pasado a formar parte del vocabulario actual como Halcón Milenario (La nave espacial de Han Solo), sables láser (espadas con un reconocible sonido silbante), las tropas imperiales, los caballeros Jedi o uno de los personajes más emblemáticos y reconocibles del planeta: Darth Vader

Narra la historia de un joven deseoso de aventuras que tras la muerte de sus tíos se une a Ben Kenobi, un caballero Jedi, acompañado de dos androides que portan un mensaje de ayuda trasladado desde planetas en guerra. A su curioso viaje les acompañarán un veterano piloto de naves espaciales llamado Han Solo (papel que convirtió a Harrison Ford en una estrella) y su peludo compañero Chewbacca, para rescatar a una princesa de las manos del malvado y todopoderoso Vader. 

Mucho antes de que las imágenes por ordenador pudieran establecerse como estándar, Lucas consiguió fotografía y modelos detallados, exteriores bien escogidos (Las escenas desérticas de Tatooine fueron rodadas en Túnez) filmadas en complejos decorados para contar la historia de otro universo y otros planetas, dominado por el imperio del mal pero donde las fuerzas rebeldes se están agrupando para derrotar a los malos. La maravillosa banda sonora compuesta por John Williams es de lo más destacable dentro de la saga galáctica. En una época donde predominaba el pop o el jazz dentro del mundo del cine, Williams volvió a la música clásica grabada con orquesta, triunfando una vez más. Temas como "La marcha imperial" asociada a la portentosa figura de Darth Vader tienen un valor mastodóntico dentro de las melodías populares. 

Darth Vader, que viene del juego con la palabra Dark y Vader que significa "Padre" en holandés, podria interpretarse "Padre Oscuro". Atabiado con vestiduras negras, una capa, un caso de plástico y una máscara amenazadora, acompañada de una respiración artificial escalofriante, Vader podría considerarse el personaje más característico de la saga. Debajo del traje se encontraba David Prowse, con la voz en inglés de James Earl Jones y en castellano del gran Constantino Romero, dominador del imperio del mal que se enfrantará en una batalla crucial con las fuerzas rebeldes, poseedor de la fuerza y antiguo Jedi, que sucumbió ante el reverso oscuro de la fuerza que da equilibrio a la galaxia. 

En 1980 se estrenó 'Episodio V: El imperio contraataca', sensacional continuación del éxito fulminante y fenómenos popular que supera a la primera en efectos especiales, galardonados con un Oscar. Aparecen personajes nuevos y sólidos como el gallardo y enigmático Lando Calrissian o el cazador de recompensas que persigue al bueno de Solo, Boba Fett. Dotada de personalidad, escenas de acción espectaculares y con el floreciente romance del trío protagonista, todo bajo la batuta de un nuevo director, Irvin Kershner

Luke Skywalker continúa su preparación como caballero Jedi experimentando la Fuerza en los pantanos de Dagobah, bajo la tutela del extravagante maestro Yoda, otro personaje emblemático que aparece en esta secuela. La acción es trepidante, desde el espectacular planeta helado de Hoth hasta la batalla que conduce al máximo apogeo en la Ciudad de las Nubes donde el archienemigo Vader rebela a Luke la horrible verdad que hay en el corazón del mito de Star Wars. Todo aderazado con una magistral partitura de John Williams. "Es un mal momento para la rebelión..." o "La Fuerza está contigo pero todavía no eres un Jedi." son algunas de las frases que nos deja en la memoria el incombustible Vader, pero no sabe que la lucha solo acaba de comenzar. 'El imperio contraataca' contiene todas las frenéticas emociones que alzaron a la cinta original, un vibrante guión y un espíritu de diversión que no decae.

La trilogía se cierra en 1983 con el 'Episodio VI: El retorno del Jedi' dirigida por Richard Marquand. Empieza cuando ha transcurrido cierto tiempo desde los acontecimientos llenos de suspense del Episodio V. Luke Skywalker es ahora un guerrero ensimismado que viste de negro y busca respuestas. Conocer total de la Fuerza vuelve a su planeta natal, Tatooine, para ayudar en sus amigos que están en las garras de Jabba el Hutt. Leia vestida con un bikini de ciencia ficción (del que todavía hablan con entusiasmo sus múltiples admiradores) como prisionera de Jabba y Han Solo convertido en una estatua de carbonita y una aventura donde el hilo principal es parecido al del film original. El Imperio está construyendo otra Estrella de la Muerte y nuestros héroes deben destruirla. Algunas nuevas razas como los Ewok, una especie de ositos de peluche que se ganarán el afecto del público, sobre todo el de corta edad. Efectos especiales impresionantes, música magistral que ponen hábilmente fin a la visión de Lucas de la lucha galáctica entre el bien y el mal.

Al crear La Guerra de las Galaxias, Lucas hizo un mundo grandioso, un nuevo estilo de cine y una inolvidable epopeya sobre la lucha entre el bien y el mal nunca superada. 


“El miedo es el camino hacia el Lado Oscuro, el miedo lleva a la ira, la ira lleva al odio, el odio lleva al sufrimiento. Veo mucho miedo en ti”.



Valoración (trilogía original): [8/10]    
★★★★★★★







miércoles, 23 de diciembre de 2015

Crítica: 'El renacido (The Revenant) ' Alejandro González Iñárritu (2015)



El regreso de Iñárritu un año después de ofrecernos Birdman no podría ser más satisfactorio. En este caso para ofrecernos una historia de supervivencia y venganza. Cargada de realismo y áspera como la vida misma.

En 1820 Huhg Glass resulta herido mortalmente, ante la imposibilidad de hacer nada por él sus compañeros lo abandonan en el bosque. Este es el  punto de partida de una obra que pese a carecer de un gran volumen de diálogos y  cargarlo  todo a su puesta en escena y a una impresionante fotografía, funciona perfectamente. La fuerza que le imprime Iñárritu a cada imagen apoyado en el trabajo fotográfico de Emmanuel Lubezki basta por sí sólo para mantener embobado al espectador. Y es que la factura técnica es exquisita en todos los aspectos; la cámara se recrea en cada brizna de hierba, en cada copo de nieve y cada gota de sangre. Por momentos eres capaz de sentir el frío, el hambre y el dolor de las heridas. Pero la cinta no es solo eso; el trabajo  interpretativo de Leonardo Di Caprio y Tom Hardy es completamente absorbente, llevándote a empatizar y  vivir todas las situaciones que se van produciendo. Con un trabajo actoral de esos en los que una mirada, una expresión o un gesto llega a transmitir más que mil palabras.

Estamos ante otro caso en el que no es la historia que te cuentan sino el cómo te la cuenta lo que te mantiene pegado a la butaca. La cinta exuda realismo por todos los poros; es áspera, cruel, sucia, violenta y humana. Deja diversas escenas e imágenes (a las cuales no hago mención para evitar spoilers)  que sin duda quedarán en la retina del espectador por mucho tiempo. 


En definitiva un film muy sólido con una atmósfera impresionante. Cargado de tensión, realismo, supervivencia y venganza. Revive el género western y sin duda aportará una firme candidatura a los Oscar de este año.


Valoración: [8/10]  
★★★★★★


Rubén .

 


miércoles, 20 de mayo de 2015

Crítica: Mad Max: Furia en la carretera (Mad Max: Fury Road), (George Miller, 2015)


Welcome to the jungle. Bienvenidos a la locura, a la violencia y a la desbordante acción, que incubada en la mente de George Miller, hará las delicias de los amantes del superávit adrenalínico. El director de Babe, el cerdito en la ciudad (¿...?) o Happy Feet vuelve a rescatar la saga que le hizo triunfar hace más de tres décadas con un jovencito Mel Gibson a la cabeza de manera fulgente, a priori de lo que cabría esperar, con un ardoroso Western futurista. 

Los fans de la trilogía Mad Max (Salvajes de autopista, El guerrero de la carretera y Más allá de la cúpula del trueno) deberían descorchar el champán y celebrar la victoria conseguida con esta cuarta entrega, pues si buscan todo lo excesivo de las añejas lo encontrarán en mayor cantidad y elevado a la máxima potencia. 

Tom Hardy y Charlize Theron protagonizan la nueva aventura en los vastos desiertos de un futuro postapocalíptico plagado de miseria, locura, motores, rueda quemada, pólvora y carencia de aburrimiento. Miller sentó la base del futuro que iba a encontrar la humanidad en su trilogía original, aquí estamos ante un resultado mucho más desastroso, con escasez de elementos básicos como agua o comida, la lucha por el combustible sigue a la orden del día y la tiranía asoma por la ventana de la ciudadela donde se desarrolla la trama. Furiosa y Max comienzan una frenética aventura en busca de la rendición, la supervivencia e incluso la espiritualidad en territorio hostil, y lo mejor de todo es que nos pillará a nosotros de por medio. 

Implacable espectáculo a nivel visual, sonoro, coreografiado de manera formidable y con una ambientación que ni pintada. Diseño de escenarios, vestuario y bólidos francamente bueno, desproporcionado en cuanto a los vehículos pero acorde con el exceso general del film. Intensas escenas de peleas, combates cuerpo a cuerpo o desde los coches, violencia explícita aderezada con fuego y un ritmo vertiginoso convirtiéndose en pura dinamita. En este punto es donde radica la majestuosidad de Mad Max: Fury Road, el punto flaco viene a la hora de confeccionar el guión, parco en palabras y en originalidad narrativa, sitemáticamente podemos definir los acontecimientos como previsibles, no todos pero si la gran mayoría.

Ciertamente, se queda en segunda plano y nunca mejor dicho, ya que la cinta está confeccionada y pensada para que la imagen/sonido sobrepase la de la trama, consiguiéndolo sin lugar a dudas. Los guionistas no se han estrujado el cerebro pero cuando decides ver Mad Max no buscas otra cosa que exorbitante acción y eso lo vas a encontrar. Estamos ante un derroche de adrenalina, un exceso de acción, violencia de alto voltaje (no gore, poca sangre pese a la ferocidad que vemos en pantalla), frenetismo descontrolado, locura que haría palidecer a los malvados de la trilogía en la que se basa el film y mucha rueda quemada. Tan atronadora y espectacular visualmente que su disfrute máximo solo se puede sentir en una butaca de cine o un gran sistema de sonido. Solo falta poder percibir el silbido de las balas y el olor a gasolina para sentirse un nuevo demente de la velocidad en la moderna obra de la franquicia estrella creada por George Miller. Algunos detalles como el guión o la previsibilidad de algunas partes no le hacen coronarse como una obra aún mayor pero lo que en realidad buscamos lo vamos a encontrar, y disfrutar como un loco.






Valoración: [7/10]     
★★★★★★★



Paco Garrido



Otras críticas de blogs amigos:

Aleucine
Gusanillo de cine
Cine de patio


jueves, 1 de enero de 2015

Crítica: "Exodus: Dioses y reyes (Exodus: Gods and Kings )" Ridley Scott 2014.



Ridley Scott vuelve para embarcarse en una epopeya basada en el célebre pasaje bíblico de la vida de Moises. Con el especial aliciente de haber sido rodada en terreno patrio, algo que siempre nos sirve para despertar nuestra curiosidad.

En este caso no merece mucho la pena comentar en profundidad la historia; ya que es de sobra conocida, tan solo mencionar que Scott hace una interpretación muy personal de la figura de Moisés. La película resulta entretenida para ser disfrutada en la pantalla grande, si  te dejas llevar  por los efectos especiales y la pirotecnia puede resultar hasta disfrutable. Pero sin duda tras el visionado es una cinta que no aporta mucho más que dos horas de entretenimiento sin mucha más historia. Los  personajes apenas tienen profundidad, la historia tiene momentos chirriantes argumentalmente, siendo las interpretaciones simplemente aceptables.

Finalmente el regreso de Scott se aleja por mucho de Gladiator  estando más al nivel de sus últimas obras como Prometheus, pero sin resultar por suerte tan decepcionante como El consejero . Definitivamente seguimos esperando ese gran regreso  suyo con una cinta como la de sus mejores tiempos. Exodus se perfila como una superproducción bíblica que emociona más por su envoltorio que por su profundidad argumental. Aún así resulta medianamente entretenida si eres capaz de relajarte y simplemente disfrutarla como lo que es.






Valoración: [6/10] ★★★★★★


Rubén



* Esta crítica está considerada de carácter comunitario dentro de un grupo de cinéfilos que compartirá su opinión de la misma entre los miembros del conjunto. Así pues, mostraré los enlaces a los distintas críticas confeccionadas por cada miembro para su información:


Cine de Patio
Los Guiltys de Pinguirina
Coleccionista de Instantes cinematograficos
Motel Purgatorio 
RavenHeart
El Frickyblog
El blog de Ivan Rúmar